hoy, leyendo un cuento de Roberto Arlt, se me vino a la mente el momento ese en el que tocamos el timbre de una casa, o el portero de un edificio, mas precisamente, los minutos posteriores: la espera.
es extraña la cara, la expresion que tenemos, segun lo que vayamos a hacer dentro de ese sitio cuando nos abran la puerta...
pude recordar las siguientes:
cara de "vengo a pedir un favor", cara de "me tengo que atender con el medico", cara de "vengo a conocer a mis suegros", cara de "me estoy meando", cara de "no me digas que no hay nadie!!" , cara de "si, de la pizzeria"...etc
si pueden, detenganse un ratito a mirar e imaginarse que vendra a hacer el que espera a que le abran...
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