Increible, pero en este momento mi mente me lleva a las mismas dudas: cuanto tiempo podremos aferrarnos a nuestra pelotudez de siempre?, no se cansa la gente alrededor mio de exigirme que sea como ellos? yo se que ser asi puede acarrear ciertas consecuencias, posiblemente graves, no se si es miedo al cambio, al crecer o al madurar; pero porque cambiar lo que esta bien tal cual esta?. Ahora nos hacen ver que eso que haciamos antes era un lujo, el simple hecho de tirarse por ahi a no hacer nada, reconozco que el hombre se regocija al llevar a cabo una tarea bien hecha, pero somos nosotros que somos muy fiacas o la sociedad que exige mal?.
Atrapados en un grito silencioso los sapitos pelean por salir mientras las brujas les dan chicle bubalu de banana con dulce de leche.
Y ni hablar del barometro.
Un saludo Marian, re copado el Blog, segui desperdigando felicidad como venis haciendo.
Marco.
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